martes, abril 29, 2008

Esa Batalla


¿Cómo compaginar
la aniquiladora
idea de la muerte
con ese incontenible
afán de vida?

¿cómo acoplar el horror
ante la nada que vendrá
con la invasora alegría
del amor provisional
y verdadero?

¿cómo desactivar la lápida
con el sembradío?
¿la guadaña
con el clavel?

¿será que el hombre es eso?
¿esa batalla?


Mario Benedetti


P.D.: Aquí va otro escrito de este genial poeta que estos días me tiene cautivado y muy entretenido. Este poema me sirve como anuncio. Estoy "trabajando" en un nuevo poema, pero hasta que las musas no terminen de visitarme durante los abrazos de Morfeo, no podrá ver la luz. Espero que sea pronto. Intentaré que el próximo poema que publique sea el mío, pero estará difícil si otro poema de este autor o de otro me emociona y quiera compartirlo con vosotros, que seguro que pasa. Espero poder tenerlo terminado pronto. Saludos.

domingo, abril 27, 2008

Feelings


"Créeme, yo sé lo que es experimentar estas emociones todas juntas y por primera vez. Tu mente y tu corazón fueron entrenados para no reconocerlas, pero han estado allí todo el tiempo, esperando a que las encontraras y las liberaras. La libertad no siempre es fácil. Has realizado un largo viaje interno a un lugar donde las consecuencias emocionales pueden ser más dolorosas, pero las compensaciones superarán a todo lo que hayas podido imaginar."

jueves, abril 24, 2008

Por Fin


Pues sí, por fin tengo en mi poder el nuevo disco de mis queridos P.O.D. Catalogados incorrectamente como Rock Cristianos, estos san dieguenses hacen las delicias de mis oídos con sus mensajes positivistas y su gran variedad de estilos musicales entre los que están el nu-metal, el reggae, el hip hop etc.

En este disco, se ha reincorporado Marcos Curiel, el guitarrista de los inicios y se nota su regreso, aunque el anterior Jason Truby, que participó en los discos Payable on Death y Testify, lo hacía fenomenal. Os dejo con el videoclip de su primer single.


Hasta Mañana

Hasta mañana




Voy a cerrar los ojos en voz baja
voy a meterme a tientas en el sueño.
En este instante el odio no trabaja
para la muerte que es su pobre dueño
la voluntad suspende su latido
y yo me siento lejos, tan pequeño

que a Dios invoco, pero no le pido
nada, con tal de compartir apenas
este universo que hemos conseguido

por las malas y a veces por las buenas.
¿Por qué el mundo soñado no es el mismo
que este mundo de muerte a manos llenas?

Mi pesadilla es siempre el optimismo:
me duermo débil, sueño que soy fuerte,
pero el futuro aguarda. Es un abismo.

No me lo digan cuando me despierte.


Mario Benedetti

lunes, abril 21, 2008

Deseada Felicidad






Muchas personas se pierden las pequeñas alegrías mientras aguardan la gran felicidad.
Pearl S. Buck.


"Nuestra sociedad ha hecho de la felicidad un objeto, algo que conseguir, algo a lo que llegar. Desde esta perspectiva la hemos confundido con el confort, el placer o el bienestar, que si bien pueden apuntar hacia ella, no son lo mismo.

Es realmente difícil ser felices si buscamos incesante y angustiadamente en qué consiste la felicidad. Porque ésta no es un lugar al que llegar, es más bien una manera de andar. No es un destino, es un síntoma que aparece al caminar. Y mientras hay quienes se dedican a perseguir la felicidad, otros la crean amando, sirviendo, desarrollando su conciencia, procurando cuidar lo esencial o brindando pellizcos de alegría a quienes les rodean y, cuando lo hacen, son felices.

En un mundo donde cada vez más se confunde valor con precio y dejamos de valorar lo esencial, la infelicidad, véase, la depresión y la angustia, no paran de aumentar. La cuestión es que las pastillas no nos darán la felicidad como tampoco no nos liberarán completamente de esos dos males que nos aquejan hoy más que nunca. Pretenden también borrar la tristeza, eliminarla como algo innecesario, incómodo. Grave error: cuando ésta es tan necesaria para hacernos personas, humildes, compasivas, lúcidas. Es más, gracias a la tristeza reconocemos, por contraste, la alegría, el gozo, la felicidad.

¿Dónde está entonces la felicidad? ¿Dónde la debemos buscar? Quizás más que buscarla podemos encontrarla aquí y ahora. En el viaje por las palabras de los sabios que tanto meditaron o que tuvieron el don de la lucidez estamos viendo que la vida es un arte y que como tal, todo lo bello que de ella deriva también lo es. Luego, en ese arte que es vivir nos daremos cuenta que probablemente la felicidad no se busca, se encuentra; que la felicidad no está en las cosas, sino que se pone en ellas; que más que un destino es el viaje; y que, en definitiva, es un lenguaje que podemos desarrollar, porque depende de nosotros. Luego, como arte que es, la felicidad la podemos crear nosotros en un ejercicio de entrega, amabilidad, gratitud, generosidad, consciencia, ternura, amor, en definitiva. Ojalá tu vida sea una vida feliz, porque así tu lo desees, lo crees, lo hagas a pesar de encontrar mil argumentos que te inviten a pensar lo contrario."




Bueno pues este es otro capítulo del libro de Alex Rovira, y última entrada al respecto ya que acabo de terminar de leermelo. Ha sido una lectura muy gratificante, edificante y que recomiendo a todo el mundo. Se aprende y se disfruta bastante. Sobre la felicidad he hablado en otras ocasiones, pienso que está, sobre todo, en las pequeñas cosas, pequeños gestos. La cita que os pongo ahora no corresponde al capítulo que os he puesto, pero es que me ha llamado mucho la atención y quería reflejarlo. Ya no pondré nada más, os dejo a los que tengáis curiosidad que leáis el libro. Espero que os haya gustado u os guste, tanto como a mí.




"No me interesa saber cómo te ganas la vida. Quiero saber lo que ansías, y si te atreves a soñar con lo que tu corazón anhela.

No me interesa tu edad. Quiero saber si te arriesgarías a parecer un tonto por amor, por tus sueños, por la aventura de estar vivo.

No me interesa qué planetas están en cuadratura con tu Luna. Quiero saber su has llegado al centro de tu propia tristeza, si las traiciones de la vida te han abierto o si te has marchitado y cerrado por miedo a nuevos dolores.

Quiero saber si puedes vivir con el dolor, con el mío o el tuyo, sin tratar de disimularlo, de atenuarlo ni de remediarlo.

Quiero saber si puedes experimentar con plenitud la alegría, la mía o la tuya, si puedes bailar con frenesí y dejar que el éxtasis te penetre hasta la punta de los dedos de los pies y las manos sin que tu prudencia nos llame a ser cuidadosos, a ser realistas, a recordar las limitaciones propias de nuestra condición humana.

No me interesa saber si lo que me cuentas es cierto.

Quiero saber si puedes decepcionar a otra persona para ser fiel a ti mismo; si podrías soportar la acusación de traición y no traicionar a tu propia alma...

Quiero saber si puedes ver la belleza, aun cuando no sea agradable, cada día, y si puedes hacer que tu propia vida surja de su presencia.

Quiero saber si puedes vivir con el fracaso, el tuyo y el mío, y de pie en la orilla del lago gritarle a la plateada forma de la luna llena: ¡Sí!

No me interesa saber dónde vives ni cuánto dinero tienes. Quiero saber si puedes levantarte después de una noche de aflicción y desesperanza, agotado y magullado hasta los huesos, y hacer lo que sea necesario para alimentar a tus hijos.

No me interesa saber a quién conoces ni cómo llegaste hasta aquí. Quiero saber si te quedarás en el centro del fuego conmigo y no lo rehuirás.

No me interesa saber ni dónde ni cómo ni con quién estudiaste. Quiero saber lo que te sostiene, desde el interior, cuando todo lo demás se derrumba. Quiero saber si puedes estar solo contigo y si en verdad aprecias tu propia compañía en momentos de vacío."

ORIAH MOUNTAIN DREAMER

domingo, abril 20, 2008

Propósito, voluntad y buena suerte




"La vida se construye en un diálogo entre el azar y nuestra responsabilidad. Decir que todo depende del azar es resignarse, rendirse, dejar a cero nuestra capacidad para redirigir o redefinir la vida. Decir que somos nosotros los que podemos hacer todo cuanto queramos, que tenemos todo el poder para crear la realidad a nuestra medida, no tan sólo es una fantasía muy peligrosa para nuestro entorno sino más bien un oscuro delirio narcisista.

El veneno está en la dosis. Si nos resignamos porque creemos que no podemos hacer nada y que el destino está escrito, entonces la partida de la vida será dolorosa y seguro que muy aburrida. En el otro extremo, si caemos en un delirio de omnipotencia, las bofetadas que recibiremos serán de tal calibre y tan necesarias que o enloqueceremos o caeremos en una depresión que nos devuelva el sentido de realidad.

Entre lo uno y lo otro existe la capacidad de ir desarrollando la lucidez necesaria para saber a dónde podemos llegar, paso a paso, trabajando y esforzándonos en aprender y hacer crecer nuestras capacidades de comprender, amar y actuar. Quizás lo importante es no dejar de hacerse preguntas y de sembrar, cada día, semillas de posibilidades, crear nuevas circunstancias, prepararnos para cuando florezca la oportunidad que nos abra las puertas hacia una nueva realidad deseada y esperada durante mucho tiempo por la que nos hemos estado preparando. La buena suerte quizás es, simplemente, la combinación de la preparación y la oportunidad. La primera depende de nosotros, la segunda, no tanto, aunque con la práctica quien sabe.

Y en esa necesaria preparación para el juego de la vida, el propósito entendido como voluntad y entrega para que un anhelo se haga realidad, tiene un papel esencial. Woody Allen, lúcido maestro, dijo: "Sólo me ha llevado cuarenta años tener un éxito de la noche a la mañana". Pues eso. A remar.



"Empieza haciendo lo necesario, luego aquello que sea posible, y acabarás haciendo lo imposible" Francisco de Asís

"La paciencia tiene más poder que la fuerza" Plutarco

"Son tus decisiones y no el azar lo que determina tu destino" Jean Nidetch

"Existe una puerta por la que puede entrar la buena suerte, pero tú tienes la llave" Proverbio Japonés

"Romped vuestros límites, haced saltar las barreras de lo que os constriñe, movilizad vuestra voluntad, exigid la libertad como un derecho, sed lo que queréis ser. Descubrid lo que os gustaría hacer y haced todo lo posible para conseguirlo" Richard Bach

"La suerte es el pretexto de los fracasados" Pablo Neruda

"Sé quien en verdad eres. Descubre tus talentos y tu propósito en la vida. Esto te llevaráa hacer lo que amas y porque haces las cosas con amor, obtendrás lo que necesitas" Erich Fromm





Bueno queridos lectores, este es otro capítulo del libro de Alex Rovira, Las palabras curan, el cual me está gustando mucho y lo voy leyendo poco a poco sacando lo mejor del libro y he querido compartirlo con vosotros. El destino es algo en lo que creo, pero también sé que no es bueno que deba dirigir mi vida, ni la de nadie. En nuestras manos está el cambiar el giro de las cosas que nos acaecen con paciencia, mucha fuerza de voluntad y una sonrisa. Os he puesto también algunas de las citas que aparecen en el capítulo, de las que más me han gustado. Espero que os gusten. Gracias.

martes, abril 15, 2008

Las Palabras Curan






"Las palabras son el vehículo de contacto de nuestra alma con la realidad. Gracias a ellas tomamos conciencia y simbolizamos lo vivido. Las palabras nos brindan además de la posibilidad de significar toda experiencia, desde lo aparentemente banal hasta lo trascendente: las palabras nos ayudan a dar un sentido a la vida.

Gracias a las palabras percibimos las diferencias, los contrastes y nos acercamos al mundo. Con ellas creamos y exploramos universos reales e imaginarios. Son puente y camino para conocer y reconocer al ser próximo, descubrir sus matices, su humanidad y, como no, son también el vehículo para llegar hasta nosotros mismos. Paradójicamente, también las palabras nos ayudan a tomar distancia, a ganar perspectiva, a desahogarnos. Nos permiten acercarnos y alejarnos, gestionar distancias, entregarnos o partir. [...]

Existen palabras que condensan experiencias, sentimientos, anhelos, incluso una vida: el nombre de la persona amada, el de los lugares de nuestra infancia, la canción que evoca el recuerdo, la poesía que siempre nos acompaña, la voz de nuestros afectos. En ocasiones, al escuchar palabras como hijo, amigo, padre, madre o especialmente el nombre propio del ser amado, se evoca y recrea un universo de recuerdos y emociones a veces más rico e intenso que la propia realidad cotidiana.

Hay palabras sencillas, inmediatas, adecuadas, amables, que son un regalo. Expresadas desde la espontaneidad, un adios, un gracias, un por favor, un te quiero, pueden iluminar un momento, y en según qué circunstancias, ser el recuerdo que da también sentido a una vida. A menudo una voz amable y sincera es mucho más terapéutica que cualquier medicamento. Un gesto y una voz adecuada pueden cambiarnos el humor en un instante. La palabra nos lleva a la risa, a la alegría, a la ternura y al humor desde lo más inesperado. La palabra sorprende, conmueve, enternece y emociona.

Pero lo más milagroso que sucede con las palabras, es que nos pueden curar. Con la palabra podemos hacer nuestra alquimia interior: aliviar dolores, lidiar con nuestras dudas, rabias y culpas, concluir duelos, sanar heridas, convencer miedos, soltar yugos, terminar quizás con esclavitudes interiores y exteriores: liberar y liberarnos. [...]"



Bueno, estos son algunos trozos, que me han gustado muy mucho de la introducción del nuevo libro de Alex Rovira: Las palabras curan. A este autor lo conocí a través de otro libro suyo que me encantó El laberinto de la felicidad. Lo he puesto aquí, aparte de que quería compartir esto con vosotros, porque lo que dice sobre la palabra es algo con lo que estoy muy de acuerdo: las palabras, sobre todo bien utilizadas, pueden cambiar muchas cosas. Una sola palabra puede hundirte en el pozo de las miserias, si es empleada para hacer el mal, o te puede hacer ascender a lo más alto de las alegrías. Yo soy partidario de utilizar las palabras para hacer el bien, o por lo menos lo intento.

Espero que os haya gustado, y si os a hecho pensar, mucho mejor. Cuando termine el libro os pondré algo por aquí, de lo que más me haya emocionado/gustado. Hasta la próxima :)


lunes, abril 14, 2008

Felicidades


FELIZ DÍA DE LA REPÚBLICA A TODOS

sábado, abril 12, 2008

Un par de novedades musicales







Buenas, en estas dos últimas semanas he podido disfrutar de los nuevos trabajos musicales de dos grupos que hacen las delicias de mis oídos: A sense of purpose de In flames y When angels and serpents dance de P.O.D. Puedo decir que el primero de ellos lo tengo original y el segundo estoy esperando a que lo traigan, ya que aunque salía el 8 de abril, ya se sabe, todo este de material llega con más retraso de lo habitual en España. Cuando tenga adquirido el disco de P.O.D. haré una entrada particular para ellos. Esta va sobre todo dedicada a In Flames. Os pongo la canción que más me gusta de este disco, que os recomiendo que escuchéis, aunque vuestros gustos no vayan por los mismo derroteros. Dadle una oportunidad. También os dejo con el clip de su primer single: The mirror´s truth. Que lo disfrutéis.


jueves, abril 03, 2008

El espejo que ríe



"En las tierras fronterizas con forma de media luna del Mundo Medio, las yentes afirman que no hay sino tres cajas en el hombre: una caja del pensamiento, una caja del corazón, y una caja-ki.

La mejor y más elevada es la caja del pensamiento, que contiene todas las ideas y sueños. Igualmente importante es la caja del corazón, de la que proceden todos nuestros sentimientos de amor y tristeza, alegría y arrepentimiento. En la parte más baja de la pila -centrada en la parte de nosotros de la que salen nuestra lujuria y nuestros desechos-, se halla la caja-ki. Todos nuestros impulsos egoístas y nuestras pequeñas envidias se alojan aquí, junto con los secretos más oscuros y desagradables de nuestras almas.

Cada una de las tres cajas, incluso la más básica, sirve a un propósito. Pero en nuestros mejores momentos las dos más altas compensan los impulsos instintivos de la más baja. Con el tiempo, la lujuria puede profundizar en amor, y si es suavizada con la justicia y el entendimiento, la furia rabiosa puede ser aprovechada para transformar naciones.

Pero igual que lo mejor de nosotros mismo puede compensar lo peor, de la misma forma lo peor puede contaminar lo mejor. ¿Cuántas veces hemos oído hablar de amor convertido en odio, o infectado por las envidias?"




Pues bueno, así empieza el extra del número cuatro de La Torre Oscura, adaptación en cómic, de la mano de Marvel, de la novela de Stephen King. Este cómic me tiene atrapado, cada vez que leo uno quiero más y más. La historia me está encantando y los dibujos para que contaros, rodeados todos de un halo de oscuridad. En una palabra, magnífico, desde mi punto de vista claro. Cuando la termine os intentaré hacer un resumen de toda esta miniserie o directamente os dejo las grapas.

El fragmento este, lo he puesto porque me llamó la atención un montón al leerlo, la reflexión y división que hace del ser humano, la cual creo acertada, aunque no lo haría yo en cajas, son partes de un todo.


¿A qué caja le proporcionais más importancia?

martes, abril 01, 2008

Cuento


"Cuentan que, una noche, cuando en la casa todos dormían, el pequeño Ernesto, de cinco años, se levantó de su cama y fue al cuarto de sus padres. Se paró junto a la cama del lado de su papá y, tirando de la colcha, lo despertó.

- ¿Cuánto ganas, papá? - le preguntó.
- Iiieee... ¿Cómo? - preguntó el padre entre sueños.
- Que cuánto ganas en el trabajo.
- Hijo son las 12 de la noche, vete a dormir.
- Sí, papi, ya me voy, pero tú, ¿cuánto ganas en tu trabajo?
El padre se incorporó en la cama y en grito ahogado le ordenó:

- ¡Te vas a la cama inmediatamente, ésos no son temas para que preguntes! ¡¡ Y menos a medianoche!! - y extendió su dedo señalando la puerta.

Ernesto bajó la cabeza y se fue a su cuarto.
A la mañana siguiente, el padre pensó que había sido demasiado severo con su hijo y que su curiosidad no merecía tanto reproche. En un intento de reparar su error, durante la cena, el padre decidió contestarle:

- Respecto a la pregunta de anoche, Ernesto, yo tengo un sueldo de 2.800 euros, pero con los descuentos me quedan unos 2.200.
- ¡Uhh!... ¡Cuánto ganas, papi! - contestó Ernesto.
- No tanto, hijo, hay muchos gastos.
- Ahh... ¿Y trabajas muchas horas?
- Sí, hijo, muchas horas.
- ¿Cuántas, papi?
- Todo el día, hijo, todo el día.
- Ahh - asintió el chico, y siguió-, entonces tienes mucho dinero ¿no?
- Basta de preguntas, eres muy chiquito para estar hablando de dinero.

Un silencio invadió la sala y, callados, todos se fueron a dormir.
Esa noche, una nueva visita de Ernesto interrumpió el sueño de sus padres. Esta vez traía un papel con números garabateados en la mano.

- Papi, ¿me puedes prestar cinco euros?
- Ernesto... ¡¡ Son las dos de la mañana!! - se quejó papá.
- Sí, pero ¿me puedes...?
El padre no le permitió terminar la frase.
-Así que éste era el tema por el cual estás preguntando tanto sobre dinero, mocoso impertinente. Vete inmediatamente a la cama antes de que te dé con la pantufla... Fuera de aquí... A la cama. Vamos.




Una vez más, esta vez puchereando, Ernesto arrastró los pies hacia la puerta.
Media hora después, quizá por la conciencia del exceso, quizá por la mediación de la madre o simplemente porqie la culpa no le dejaba dormir, el padre fue al cuarto de su hijo. Desde la puerta lo escuchó lloriquear casi en silencio.

Se sentó en su cama y le habló:
- Perdóname por haberte gritado, Ernesto, pero son las dos de la madrugada, todo el mundo está durmiendo, no hay ningún negocio abierto, ¿no podías esperar hasta mañana?
- Sí, papá - contestó el chico entre mocos.
El padre metió la mano en su bolsillo y sacó su billetera de donde extrajo un billete de cinco euros. Lo dejó en la mesita de luz y le dijo:
- Ahí tienes el dinero que me pediste.

El chico se enjugó las lágrimas con la sábana y saltó hasta su ropero. De allí sacó una lata y, de ésta, unas cuantas monedas de un euro. Añadió los cinco euros al resto y contó con los dedos cuánto dinero tenía.
Después, tomó el dinero entre las manos y lo puso en la cama frente a su padre que lo miraba sonriendo.
- Ahora sí - dijo Ernesto -, llego justo, nueve euros con cincuenta céntimos.
- Muy bien, hijo, ¿y qué vas a hacer con ese dinero?
- ¿Me vendes una hora de tu tiempo, papi?"

Cuando alguien te quiere, lo que hace es ocupar una parte de su vida, de su tiempo y de su atención en ti. Y cuando tú quieres haces lo propio. Cuando alguien te quiere, sus acciones dejan ver claramente cuánto le importas.